viernes, 29 de enero de 2010

Alo?

Fue de esas llamadas que uno no espera, y que dice: Nah, a mi no me pasará. Pues, si, me pasó a mí.

Eran las 3 de la tarde y debido al cansancio y a la falta de trabajo, decidí que era momento de echarme a descansar un rato. Vi un capitulo mas de Dr. House (serie que recién empiezo a ver gracias a José Luis, quien ha logrado que me vuelva adicta –por así decirlo), y una vez terminado mis ojos decidieron que el cansancio era tan fuerte como para cerrarse.


Una hora después de eso el teléfono sonó, y yo estaba bastante dormida, pero a lo lejos escuché que sonaba. Me levanté algo asustada y rápidamente me fui a contestar.

Asumí que era mi madre, ya que casi siempre que me llama yo estoy dormida; o tal vez uno de los tantos call center´s que llaman preguntando por mi mamá o papá para decirles que se han hecho acreedores de una EXCELENTE BENEFICIO ECONOMICO (es decir, saquen plata y endéudense pero con nosotros)


Al levantar el teléfono (y aun medio dormida) escuche a una persona llorar, y mientras se quejaba decía: llamen a mi hermana por favor! No estoy segura de todo lo que decía, porque, como les digo, estaba aún algo dormida. Unos segundos después de que pasó esto, y yo intentar recuperar la total conciencia, una persona pregunto por mi madre diciendo que llamaba de la comisaria de algún sitio (ya ni recuerdo de donde), y que tenía que acercarse a buscarlo.

Le dije que ella no estaba, a lo que el sujeto pidió que me identifique. Me pareció rarísimo, y de inmediato me di cuenta que no era cierto, sin embargo, empecé a ponerme algo nerviosa. Por suerte no lo suficiente para revelar mayor información, así que le indique al señor que yo era familiar (sin decir mi nombre) y que me diga a mí qué pasaba.


El hombre (o como decía él: policía), empezó a alterarse un poco y me decía que no me podía dar esa información sin que antes yo me identificara y diga mi nombre completo. Todo esto me lo decía gritándome, como para intentar atarantarme.

Me dio cólera y ya era evidente que esto no era cierto. Además, que ya sabía que este tipo de llamadas era común y también porque tiempo atrás habían hecho lo mismo llamando a la familia de José Luis diciendo que lo tenían en la comisaria por posesión de drogas.

Entonces le indique que no le daría mis datos y que me diga que familiar era. El hombre terminó de alterarse y soltó una lisura (ninguna de las comunes) tan fuerte que no soy capaz de repetirla. Solo atine a colgar el teléfono, y llamar a mi madre para avisarle lo pasado.


Fue en ese momento que mi corazón se aceleró y me puse nerviosa como cuando eres victima de robo y solo después reaccionas y sudas frio y tiemblas como loco. Exactamente me pasó eso, y mientras hablaba con mi madre empecé a llorar. No se aun por qué. Tal vez porque estaba sola en mi casa, o de solo pensar que tenían el teléfono de mi casa y los datos de mi madre.

Pero ese día el susto me duro mucho. No salí a la calle para comprar, no fui al gym.

El susto ya paso, y por suerte no se repitió la llamada. Ahora no confió en ningún tipo de llamada, y espero que simplemente no vuelva a repetirse.


Los dejo con una canción que escuche en Glee (serie a la cual, dicho sea de paso, también me he vuelto adicta)



2 comentarios:

  1. pues hay que tener mucho cuidado con esa clase de llamadas, eh... son muy tramposas!

    por cierto, esa canción de glee es pajaza!

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  2. que feo lo que te paso
    por eso jamas contesto el telefono ._.

    es broma.

    besos

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